viernes, 7 de agosto de 2009

¡En tu Honor!


Hoy es especial

porque no es el ayer

ni es el mañana

sino el presente contínuo,

eterno e impredecible sendero

por el cual se deslizan

sigilosamente nuestros pasos

hacia el final de los días.


Pero hoy también es especial

porque se recuerdan eventos

que marcaron la historia,

la historia y la vida

de una o quizás dos personas.


Por eso celebro,

con la mirada brillante

y el corazón lleno de alegría,

esperando que este día

se extienda hasta el final de nuestros días.


¡Salud!